Baja el telón en Tokio con Mitchell y Valente de protagonistas
La madrugadora jornada de hoy ha entregado las últimas medallas de estos Juegos. La canadiense Kelsey Mitchell ha heredado el trono de la velocidad de Kristina Vogel, que como ya sabéis, no pudo defenderlo por culpa del lamentable accidente de 2018. La prueba del Ómnium fue para Jennifer Valente, que sumó el oro número 39 con el que la delegación de EEUU adelantó a la Republica Popular de China en el medallero.
Velocidad individual:
Las eliminatorias comenzaron entre el Viernes y ayer Sábado. Hoy se disputaban los metales entre cuatro ciclistas. La primera semifinal enfrentó a Olena Starikova de Ucrania y a Wai Sze Lee de Hong Kong. A la europea le bastaron dos mangas para asegurarse el pase a la final y una medalla que ya había rozado acabando cuarta en el Keirin.
Por el otro lado del cuadro llegaban Emma Hinze de Alemania y Kelsey Mitchell de Canadá. La teutona vendió cara su piel obligando a la carrera de desempate, pero acabó cediendo y disputando la final de consolación contra Lee. En la lucha por el bronce a Hize, a la que se vio airada desde el sorteo, no pudo con la corredora de Hong Kong. Mal balance para Hinze si tenemos en cuenta que era seria candidata a tres oros y se va de Japón habiendo conseguido solo una plata en la velocidad por equipos.
La final se decidió en dos mangas para la norteamericana que no dio opciones. El oro de Mitchell es realmente sorprendente si pensamos que empezó a dedicarse al ciclismo a los 24 años y que tres años más tarde ya está en el olimpo de las velocistas.
Ómnium:
La prueba de scratch empezó poniendo toda la competición del revés. La italiana Elisa Balsamo, la irlandesa Emilly Kay y la polaca Daria Pikulik se enganchaban y provocaban una montonera en la que se veían involucradas muchas ciclistas. La más perjudicada junto con la representante de Polonia fue Lotte Kopecky de Bélgica. Ambas retomaron la marcha pero no serían capaces de completar el ómnium. JJOO para olvidar para la del Liv: dos caídas en la madison el Viernes y hoy otro encontronazo con la madera.
Los 40 puntos del scratch fueron al casillero de Jennifer Valente que ya no abandonaría el liderazgo de la general. En el tempo destacó Laura Kenny de Gran Bretaña que tenía que recuperar la desventaja causada por la caída, pero las demás favoritas no quedaron lejos. Kirsten Wild segunda, Valente tercera y la gran esperanza local en la pista, Yumi Kajihara, quinta.
Clara Copponi, representando a Francia, era la última superviviente de la eliminación en la que destacó la portuguesa María Martins pero otra vez Wild, Valente y Kajihara estaban muy cerca y no permitían recuperar desventajas. Todo llegaba apretadísimo para la última carrera de los Juegos en el velódromo de Izu.
Todos los intentos de ganar vuelta fueron neutralizados. La que más cerca estuvo de conseguirlo fue Amalie Didericksen de Dinamarca, pero la jauría del grupo solamente la dejó disfrutar de un paso en solitario por un sprint, aunque los puntos cosechados le sirvieron para quedarse a las puertas del pódium.
El drama llegaba con una caída de Valente con la carrera ya muy avanzada. Wild, Kajihara, Dideriksen y compañía olieron la sangre y aunque la corredora de San Diego no llegó a perder vuelta estuvo en la cola del grupo durante un buen puñado de giros. Finalmente y para sorpresa de muchas, sacó fuerzas de flaqueza y se aseguró con suficiencia el último de los sprints. Segunda fue la nipona Kajihara y tercera la neerlandesa Wild. Por detrás un marcador realmente apretado donde las medallas se repartieron por muy poca diferencia.
Fotografías: @UCI_Track y @BritishCycling